sábado, 6 de octubre de 2007
Las mil y una noches
miércoles, 3 de octubre de 2007
Miguel Delibes
Estudió Derecho y Comercio y fue también periodista. Dirigió el periódico El Norte de Castilla desde 1958 hasta 1963 y fue catedrático de Derecho Mercantil. Su primera novela se llamó La sombra del ciprés es alargada, que escribió en 1947 obteniendo el premio Nadal.
En El camino (1950), narra el proceso que sufre un niño en el descubrimiento de la vida y de la experiencia ante la amenaza de dejar el campo y marchar a la ciudad.
En 1953 publicó Mi idolatrado hijo Sisí, novela de tesis en la que aborda la vida de la burguesía provinciana en una ciudad que se parece a su Valladolid natal, así como la novela corta El Loco.
Escribió otras novelas, como son La hoja roja (1959) obra de contenido existencialista donde un fotógrafo rememora su vida al borde de la jubilación. Las ratas (1962) una novela donde cuenta anécdotas suyas en un pueblo ya desaparecido castellano, y, sobre todo, Cinco horas con Mario, su obra maestra, en donde narra la estancia de Carmen, una burguesa de derechas y de mentalidad muy estrecha frente a la tumba de Mario, profesor de instituto y de ideología izquierdista, por lo que pasó un buen tiempo en la cárcel, en la época de la dictadura franquista. En el año 2000, la Junta de Castilla y León propuso la candidatura de Miguel Delibes al Premio Nobel de Literatura, que obtuvo apoyo de numerosas entidades culturales e intelectuales, españolas e internacionales. El Consejo de Dirección de la SGAE (Sociedad General de Autores y Editores) ha resuelto proponer a la Academia Sueca los nombres de los escritores Miguel Delibes, Francisco Ayala y Ernesto Sábato como candidatos al Premio Nobel de Literatura de 2007.
El diario de Anna Frank
Esta foto es de una niña llamada Ana Frank. Durante la 2ª guerra mundial escribió un diario que es conocido por todo el mundo. Este diario habla de sus vivencias durante su estancia en un pequeño bajo que hacía de puerta falsa en Berlín. Allí vivía con su familia, escondiéndose de los alemanes como otros tantos miles de judíos.
En este diario, la niña comenta lo que le pasa, lo que siente y lo que desea, entre otras cosas. Su familia huía del poder nazi de esa época, evitando que les trasladaran a los muchísimos campos de concentración en los que encarcelaban a los judíos. No era fácil soportar el hecho de no poder salir a la calle para relacionarse con otros niños y niñas, y, Ana, para matar el aburrimiento, empezó a escribir el diario. Al principio de éste, la niña comenta que no tiene amigos, y que le gustaría contar sus cosas a una amiga, cuyo nombre sería Kitty. Además, ella misma comenta que no le gustaría que nadie leyera ni viera su diario, porque le gustaba tener intimidad si escribía cosas suyas. Ana escribe siempre que puede, contando todo lo que le pasa, por pequeño que sea. Hay un momento del libro en el que otra familia judía les hace una visita. Días después, ésa familia es descubierta por los alemanes, que los encierran en Auswitch. Ana cuenta cómo se los llevan y la tristeza que siente al saber que éso también puede pasarle a ella.
Un tiempo después, la familia de Ana es descubierta y encerrada en otro campo de concentración. El diario de Ana se ha conservado en el mismo estado en el que quedó el mismo día que fueron arrestados, guardándose como un tesoro que después fue leído por un grupo de investigadores y psicólogos.
Así, las memorias de Ana Frank han podido sobrevivir hasta nuestros días, y millones de personas han podido leer sus testimonios, que fueron publicados después de su investigación.